Enfermedad psíquica y Terapia Neural
Queremos compartir con vosotros un extracto escrito por el Dr. Pablo Koval, médico especialista en Terapia Neural.
Publicado en: Complejidad Mecanicismo Organicidad
"Psique y cuerpo no son entidades separadas, sino integrantes de una unidad indisoluble. Incluyo al tono psíquico como una de las funciones neurales naturales del ser humano. Es parte del conjunto de funciones reguladas por circuitos de autoorganización. Por lo tanto puede resultar alterado por las mismas irritaciones que comprometen procesos orgánicos. Las funciones psíquicas están integradas a la totalidad del ser y, por lo tanto, no pueden aislarse ni estudiarse por separado. El tratamiento de campos interferentes facilita también la resolución de distonías psíquicas en forma no impositiva a través del restablecimiento de circuitos biológicamente económicos.
Los profesionales de la salud estamos educados para dividir al ser humano para su estudio y tratamiento en partes cada una bajo la supervisión de un especialista que sólo sabe de esa parte. Sin embargo ese enfoque no se ajusta a la realidad, porque cuando una parte del cuerpo-mente-espíritu se enferma, está enferma la totalidad del ser. Ninguna parte funciona ni se enferma en forma aislada.
Por otro lado, los problemas psíquicos ponen de manifiesto un desorden, y son el resultado de un proceso, cuya emergencia ocurre, en este caso, en la esfera psíquica. De ningún modo esos síntomas son la causa del problema. El tratamiento específico, sólo oculta la causa real pero además puede conducir a la complejización del problema de salud.
Para que las funciones psíquicas naturales se mantengan sanas, el organismo debe estar saludable. Todos los sistemas deben funcionar en forma armónica. Factores irritativos persistentes pueden alterar la función normal del sistema nervioso y causar enfermedades. Por lo dicho, la mente, la psique, como cualquier otra parte del organismo, no puede ser analizada como un elemento que funciona de un modo independiente del resto de la persona.
Así como esta medicina evalúa la totalidad del ser para hacer un diagnóstico e instituir un tratamiento, el tratamiento también actúa sobre la totalidad del ser. Así como esta medicina plantea la no fragmentación del ser, así actúa sobre los problemas de salud sean en la esfera psíquica o física.
He tenido la oportunidad de ayudar a personas con angustia, ansiedad, miedo, pánico, fobias, depresión, trastornos psicóticos, y a víctimas de maltrato, tortura o abuso sexual. Todas llegaron y llegan tratadas con fármacos psicotrópicos en abundancia, además de asistencia psicológica. Con el enfoque sistémico, no-lineal de la Terapia Neural es posible suprimir el "empastillamiento" en la mayoría de los casos. Los recursos que utilizo son los mismos que para cualquier otra manifestación de desorden del sistema, que en estos casos particulares se expresa con predominancia en el tono psíquico.
Descartadas las causas orgánicas, la cefalea por estrés, el nudo en la garganta o en la boca del estómago, la sensación de opresión torácica, la disuria, los despeños diarreicos, la dificultad para tragar o para inspirar profundamente, el insomnio, los sueños traumáticos etc., pueden ser manifestaciones de alteración del tono psíquico.
Existe
memoria física de hechos afectivos. Puede intentarse una aplicación terapéutica
en el área donde ese ser singular somatiza sus emociones, desde un habón
intradérmico a una aplicación profunda segmentaria. El paciente puede señalarse
un área en particular de su cuerpo donde sintió el impacto de un acontecimiento
afectivo y que requiere tratamiento. Existe memoria física del maltrato. Los
golpes, el abuso también dejan memoria. Para abordar esas áreas, si hiciera
falta, es necesario que el enfermo sepa que un nuevo estímulo puede traer a la
luz recuerdos muy desagradables. La resolución de campos y focos interferentes
suele contribuir al tratamiento y resolución del problema "psíquico". A partir
de esos estímulos la totalidad del ser recibe la información que habrá de
facilitar cambios en los circuitos de autoorganización lo cual, a su vez,
permitirá al organismo recuperar el tono psíquico alterado".